Acuérdate, lectorcillo, de cuando tú y yo y otras personas de cuenta vivíamos en casa de Dona Virginia, y considera cómo el rodar de los tiempos, dando la vuelta de veinte anos, ha cambiado cosas y personas. La casa ya no existe ; Dona Virginia y su marido, o lo que fuera, Dios sabe dónde andan. Ni les he vuelto a ver ni tengo ganas de encontrármeles por ahí. Aquellos guapos chicos, aquellos otros senores de diversa condición, que allí vimos entrar, permanecer y salir, en un período de dos anos, ¿qué se hicieron ? ¿Qué fue de tanto bullicioso estudiante, qué de tan variada gente ?
Acuérdate, lectorcillo, de cuando tú y yo y otras personas de cuenta vivíamos en casa de Dona Virginia, y considera cómo el rodar de los tiempos, dando la vuelta de veinte anos, ha cambiado cosas y personas. La casa ya no existe ; Dona Virginia y su marido, o lo que fuera, Dios sabe dónde andan. Ni les he vuelto a ver ni tengo ganas de encontrármeles por ahí. Aquellos guapos chicos, aquellos otros senores de diversa condición, que allí vimos entrar, permanecer y salir, en un período de dos anos, ¿qué se hicieron ? ¿Qué fue de tanto bullicioso estudiante, qué de tan variada gente ?