Hemos entrado en una era de logros tecnológicos e innovaciones sin precedentes, ¿y no es momento ya de alegrarnos? Claro que sí, pero hay un matiz. Muy dentro de nosotros habita un deseo irresistible de recibir algo que hasta da vergüenza nombrar en voz alta.¿Nos ayudará el siglo XXI a encontrar esa anhelada Inmortalidad Inútil y Juventud Eterna?¿O la Humanidad elegirá simplemente la Fiesta Inútil?
Hemos entrado en una era de logros tecnológicos e innovaciones sin precedentes, ¿y no es momento ya de alegrarnos? Claro que sí, pero hay un matiz. Muy dentro de nosotros habita un deseo irresistible de recibir algo que hasta da vergüenza nombrar en voz alta.¿Nos ayudará el siglo XXI a encontrar esa anhelada Inmortalidad Inútil y Juventud Eterna?¿O la Humanidad elegirá simplemente la Fiesta Inútil?