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El Código del Valor: Descifrando el Precio Real de Acciones, Derivados y Criptoactivos. El Código Secreto de los Mercados: Estrategias de Inversiones para Dominar el Capital Global
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- FormatePub
- ISBN8232375072
- EAN9798232375072
- Date de parution28/09/2025
- Protection num.pas de protection
- Infos supplémentairesepub
- ÉditeurHamza elmir
Résumé
Recuerdo con una claridad que aún hoy me estremece el primer gran error de mi carrera como inversor. No fue una pérdida técnica espectacular, ni el colapso de una operación apalancada. Fue algo más sutil y, por ende, más peligroso: la arrogante certeza de que estaba comprando "barato". La acción de una empresa tecnológica, un nombre resonante y lleno de promesas, había caído un 25% desde sus máximos.
Los titulares hablaban de un "reajuste temporal", y el consenso general entre los analistas que seguía era de "oportunidad de compra". Yo, armado con gráficos que mostraban un aparente soporte y con el eco tranquilizador de la manada, acumulé posiciones. Había confundido el precio con el valor. El mercado, implacable maestro, se encargó de mostrarme la diferencia. Aquel "barato" resultó ser carísimo.
La caída continuó, no como un reajuste, sino como un colapso estructural que revelaba un modelo de negocio frágil y unas valoraciones que solo tenían sentido en un espejismo de exuberancia irracional.
Los titulares hablaban de un "reajuste temporal", y el consenso general entre los analistas que seguía era de "oportunidad de compra". Yo, armado con gráficos que mostraban un aparente soporte y con el eco tranquilizador de la manada, acumulé posiciones. Había confundido el precio con el valor. El mercado, implacable maestro, se encargó de mostrarme la diferencia. Aquel "barato" resultó ser carísimo.
La caída continuó, no como un reajuste, sino como un colapso estructural que revelaba un modelo de negocio frágil y unas valoraciones que solo tenían sentido en un espejismo de exuberancia irracional.
Recuerdo con una claridad que aún hoy me estremece el primer gran error de mi carrera como inversor. No fue una pérdida técnica espectacular, ni el colapso de una operación apalancada. Fue algo más sutil y, por ende, más peligroso: la arrogante certeza de que estaba comprando "barato". La acción de una empresa tecnológica, un nombre resonante y lleno de promesas, había caído un 25% desde sus máximos.
Los titulares hablaban de un "reajuste temporal", y el consenso general entre los analistas que seguía era de "oportunidad de compra". Yo, armado con gráficos que mostraban un aparente soporte y con el eco tranquilizador de la manada, acumulé posiciones. Había confundido el precio con el valor. El mercado, implacable maestro, se encargó de mostrarme la diferencia. Aquel "barato" resultó ser carísimo.
La caída continuó, no como un reajuste, sino como un colapso estructural que revelaba un modelo de negocio frágil y unas valoraciones que solo tenían sentido en un espejismo de exuberancia irracional.
Los titulares hablaban de un "reajuste temporal", y el consenso general entre los analistas que seguía era de "oportunidad de compra". Yo, armado con gráficos que mostraban un aparente soporte y con el eco tranquilizador de la manada, acumulé posiciones. Había confundido el precio con el valor. El mercado, implacable maestro, se encargó de mostrarme la diferencia. Aquel "barato" resultó ser carísimo.
La caída continuó, no como un reajuste, sino como un colapso estructural que revelaba un modelo de negocio frágil y unas valoraciones que solo tenían sentido en un espejismo de exuberancia irracional.