La historia que contamos es un caso bastante complejo, ocurrido en la provincia de Padua (Véneto, Italia) en 1926, con un verdugo identificado: Margonari Flaminio, un estafador en serie sin escrúpulos que se convierte en asesino. Margonari es un maestro del engaño, hábil en disfrazarse de caballero para aprovecharse de sus víctimas, en su mayoría mujeres. Esta historia es un mosaico reconstruido con algunas piezas faltantes, ya que un incendio destruyó parte del expediente del juicio de primera instancia celebrado en Padua.
Margonari es un pequeño delincuente que sobrevive con artimañas. Posee una dialéctica aceptable que le permite asumir distintos roles, como un actor en escena, siempre con el objetivo de su propio beneficio. Hasta 1926 nunca había cometido crímenes de sangre; sin embargo, cuando se ve acorralado y su fuga está en manos de la última mujer a la que, como de costumbre, ha prometido matrimonio, pierde su frialdad habitual, su astucia engañosa, y decide asesinarla.
La víctima es una mujer de Parma, Gemma Pagani, quien probablemente había descubierto los antecedentes penales del hombre que le prometió matrimonio. En Parma, la única persona que conocía la verdadera identidad de Margonari era su amigo Campana Angelo. No era intención de Gemma denunciar a su prometido Flaminio Margonari, ya que ella solo buscaba un poco de estabilidad y una nueva vida, por la cual estaba incluso dispuesta a solucionar los problemas económicos que el hombre había inventado para engañarla.
La historia que contamos es un caso bastante complejo, ocurrido en la provincia de Padua (Véneto, Italia) en 1926, con un verdugo identificado: Margonari Flaminio, un estafador en serie sin escrúpulos que se convierte en asesino. Margonari es un maestro del engaño, hábil en disfrazarse de caballero para aprovecharse de sus víctimas, en su mayoría mujeres. Esta historia es un mosaico reconstruido con algunas piezas faltantes, ya que un incendio destruyó parte del expediente del juicio de primera instancia celebrado en Padua.
Margonari es un pequeño delincuente que sobrevive con artimañas. Posee una dialéctica aceptable que le permite asumir distintos roles, como un actor en escena, siempre con el objetivo de su propio beneficio. Hasta 1926 nunca había cometido crímenes de sangre; sin embargo, cuando se ve acorralado y su fuga está en manos de la última mujer a la que, como de costumbre, ha prometido matrimonio, pierde su frialdad habitual, su astucia engañosa, y decide asesinarla.
La víctima es una mujer de Parma, Gemma Pagani, quien probablemente había descubierto los antecedentes penales del hombre que le prometió matrimonio. En Parma, la única persona que conocía la verdadera identidad de Margonari era su amigo Campana Angelo. No era intención de Gemma denunciar a su prometido Flaminio Margonari, ya que ella solo buscaba un poco de estabilidad y una nueva vida, por la cual estaba incluso dispuesta a solucionar los problemas económicos que el hombre había inventado para engañarla.