Dernière sortie
Jesús de Nazaret y el Reino interior
¿Y si el mensaje de Jesús no fuese una religión, sino una revolución interior?Durante dos mil años, el mundo occidental ha intentado responder a una sola pregunta: ¿quién fue realmente Jesús de Nazaret y qué quiso decir cuando habló del Reino de Dios? El resultado ha sido un laberinto de dogmas, credos e instituciones que, según el autor, han sepultado algo esencial: el mensaje original. Este libro no busca defender ninguna ortodoxia ni atacar ninguna fe, sino recuperar el fuego primordial de Galilea.
El evangelio que transformó la historia no se trataba de aceptar un sistema de creencias, sino de emprender el viaje más radical posible: el descenso al propio interior. Jesús reveló que el Reino de Dios no se encuentra en templos lejanos ni después de la muerte, sino dentro de cada ser humano. Miguel Ángel Ceballos fusiona rigor histórico con exploración mística. Sitúa a Jesús en su contexto real -un judío del siglo I, en la tensa Palestina romana-, para desvelar un camino de transformación práctica: el silencio, la oración del corazón, el perdón incondicional y la renuncia al ego.
El Reino se descubre a través de la cruz interior, en el acto de morir al yo superficial para nacer a la vida abundante. Una invitación urgente a ver el tesoro escondido y a vivir desde la paz que sobrepasa todo entendimiento.
El evangelio que transformó la historia no se trataba de aceptar un sistema de creencias, sino de emprender el viaje más radical posible: el descenso al propio interior. Jesús reveló que el Reino de Dios no se encuentra en templos lejanos ni después de la muerte, sino dentro de cada ser humano. Miguel Ángel Ceballos fusiona rigor histórico con exploración mística. Sitúa a Jesús en su contexto real -un judío del siglo I, en la tensa Palestina romana-, para desvelar un camino de transformación práctica: el silencio, la oración del corazón, el perdón incondicional y la renuncia al ego.
El Reino se descubre a través de la cruz interior, en el acto de morir al yo superficial para nacer a la vida abundante. Una invitación urgente a ver el tesoro escondido y a vivir desde la paz que sobrepasa todo entendimiento.
¿Y si el mensaje de Jesús no fuese una religión, sino una revolución interior?Durante dos mil años, el mundo occidental ha intentado responder a una sola pregunta: ¿quién fue realmente Jesús de Nazaret y qué quiso decir cuando habló del Reino de Dios? El resultado ha sido un laberinto de dogmas, credos e instituciones que, según el autor, han sepultado algo esencial: el mensaje original. Este libro no busca defender ninguna ortodoxia ni atacar ninguna fe, sino recuperar el fuego primordial de Galilea.
El evangelio que transformó la historia no se trataba de aceptar un sistema de creencias, sino de emprender el viaje más radical posible: el descenso al propio interior. Jesús reveló que el Reino de Dios no se encuentra en templos lejanos ni después de la muerte, sino dentro de cada ser humano. Miguel Ángel Ceballos fusiona rigor histórico con exploración mística. Sitúa a Jesús en su contexto real -un judío del siglo I, en la tensa Palestina romana-, para desvelar un camino de transformación práctica: el silencio, la oración del corazón, el perdón incondicional y la renuncia al ego.
El Reino se descubre a través de la cruz interior, en el acto de morir al yo superficial para nacer a la vida abundante. Una invitación urgente a ver el tesoro escondido y a vivir desde la paz que sobrepasa todo entendimiento.
El evangelio que transformó la historia no se trataba de aceptar un sistema de creencias, sino de emprender el viaje más radical posible: el descenso al propio interior. Jesús reveló que el Reino de Dios no se encuentra en templos lejanos ni después de la muerte, sino dentro de cada ser humano. Miguel Ángel Ceballos fusiona rigor histórico con exploración mística. Sitúa a Jesús en su contexto real -un judío del siglo I, en la tensa Palestina romana-, para desvelar un camino de transformación práctica: el silencio, la oración del corazón, el perdón incondicional y la renuncia al ego.
El Reino se descubre a través de la cruz interior, en el acto de morir al yo superficial para nacer a la vida abundante. Una invitación urgente a ver el tesoro escondido y a vivir desde la paz que sobrepasa todo entendimiento.
