Sinopsis El banco de las vidas ajenasUna mujer vive encerrada desde hace casi dos años. Su casa es su refugio y su límite, el único lugar donde el miedo no la devora del todo. Pero desde ese encierro, sigue mirando el mundo -como lo hacía cuando era joven y se sentaba en un banco de alguna plaza para observar a los demás. Desde esa mirada silenciosa reconstruye su vida y las vidas ajenas que alguna vez imaginó:los ancianos que alimentaban a las palomas, la mujer del paraguas rojo, el hombre de la bicicleta, el joven del cuaderno.
Cada uno de ellos existe en su memoria como si aún caminara frente a ella. Entre la ternura y la sombra, entre la calma y la furia, la narradora va descubriendo que escribir es su única forma de seguir viva. Porque mirar también es una manera de amar, y recordar, una forma de resistir. El banco de las vidas ajenas es una historia sobre la observación, la soledad y la imaginación como refugio. Una carta hacia todo lo que existe fuera -y dentro- de quien mira el mundo desde una ventana.
Sinopsis El banco de las vidas ajenasUna mujer vive encerrada desde hace casi dos años. Su casa es su refugio y su límite, el único lugar donde el miedo no la devora del todo. Pero desde ese encierro, sigue mirando el mundo -como lo hacía cuando era joven y se sentaba en un banco de alguna plaza para observar a los demás. Desde esa mirada silenciosa reconstruye su vida y las vidas ajenas que alguna vez imaginó:los ancianos que alimentaban a las palomas, la mujer del paraguas rojo, el hombre de la bicicleta, el joven del cuaderno.
Cada uno de ellos existe en su memoria como si aún caminara frente a ella. Entre la ternura y la sombra, entre la calma y la furia, la narradora va descubriendo que escribir es su única forma de seguir viva. Porque mirar también es una manera de amar, y recordar, una forma de resistir. El banco de las vidas ajenas es una historia sobre la observación, la soledad y la imaginación como refugio. Una carta hacia todo lo que existe fuera -y dentro- de quien mira el mundo desde una ventana.